LIFTING QUIRÚRGICO: FUSIÓN ENTRE CIENCIA Y ARTE

Por Nueva Estética

En los últimos años, se han producido avances muy significativos en cirugías de rejuvenecimiento facial. El desarrollo de técnicas quirúrgicas más precisas y menos invasivas, el papel cada vez más relevante del lipofilling y el abordaje global de todos los planos implicados en el envejecimiento permite reconstruir y afianzar de nuevo las estructuras de juventud, con resultados que se integran de manera natural en cada rostro.

El aclamado cirujano Dr. Iván Mañero firma un interesante reportaje en la sección de medicina del número de marzo de NUEVA ESTÉTICA, donde lanza una mirada panorámica sobre todas las cuestiones que hay que tener en cuenta a la hora de diseñar una cirugía lifting.

Para empezar, explica que el envejecimiento es un fenómeno que por supuesto afecta al tejido cutáneo, pero que de un modo mucho más sibilino provoca estragos en las estructuras anatómicas internas. Hoy, la cirugía facial antiedad incide en todos estos planos, para corregir flacidez y arrugas y al mismo tiempo fijar y apuntalar la arquitectura facial, para elevar y definir los volúmenes propios de un rostro joven. Este avance ha supuesto un auténtico cambio de paradigma, ya que este abordaje tridimensional implica relegar al olvido los liftings que dejaban una cara estirada de aspecto artificial y como contrapartida se garantizan resultados duraderos que se integran de manera completamente natural en la fisonomía de cada paciente, sin alterar su esencia, expresividad y personalidad.

En la mejora y naturalidad del resultado final también tiene mucho que ver la introducción del lipofilling, el empleo de grasa autóloga como material de relleno. Esta técnica ha experimentado últimamente mejoras muy interesantes respecto al procesado de la grasa y las técnicas de inyección, lo que optimiza el resultado en términos estéticos y reduce el porcentaje de reabsorción del implante. El lipofilling facial permite reponer los depósitos de grasa y esculpir de nuevo los volúmenes que se desdibujan con el paso del tiempo. Su combinación con el lifting quirúrgico implica poder abordar múltiples aspectos del envejecimiento facial y lograr resultados integrales, a medida de cada rostro.

Tras esta primera parte, el reportaje se centra en describir los tipos de lifting. Ahí el Dr. Mañero explica cuándo es recomendable realizar un abordaje endoscópico y cuándo es conveniente optar por la cirugía abierta tradicional y, por supuesto, cuenta cómo es la cirugía.

Para acabar, el Dr. Ivan Mañero ofrece los detalles del postoperatorio, subraya la importancia que tiene seguir un plan de rehabilitación postquirúrgica individualizado y explica cómo los tratamientos médico-estéticos enfocados a mejorar la calidad de la piel se convierten muchas veces en imprescindibles para ampliar los resultados de ls cirugía lifting.

Lee el reportaje Lifting Quirúrgico: Fusión Entre Ciencia y Arte

en la edición de marzo de NUEVA ESTÉTICA.

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