SUSCRÍBETE

8 Revistas      

%title

LA MEJOR DIETA PARA UN BRONCEADO DE ESCÁNDALO

Por Nueva Estética

¿Quieres presumir de morenazo este verano? Pues toma nota de los alimentos que debes añadir a tu menú veraniego para conseguir una piel de bronce y joven.

 



Betacarotenos Estimulan la producción de melanina y previenen del fotoenvejecimiento inducido por los UV. Se encuentran en los alimentos vegetales de tonos amarillos, naranjas, rojos y verdes intensos, como zanahoria, calabaza, tomate, pimiento, sandía, albaricoque, melocotón...
 
Bioflavonoides Combaten los radicales libres, protegen la piel de la oxidación, a la vez que favorecen la formación de colágeno, manteniendo los tejidos elásticos y firmes. Se encuentran en las frutas y verduras de color violeta o roja, como las moras, grosellas, frambuesas o cerezas.
 
Vitamina C Tiene propiedades antioxidantes, actuando de forma efectiva contra los radicales libres, refuerza el sistema inmunológico y ayuda a que la piel adquiera más brillo, para que el moreno tenga mayor luminosidad. Además, regula la producción de melanina y favorece la regeneración cutánea. La encontramos en frutas como la naranja, limón, pomelo, kiwi, fresas, mora… Y en otros alimentos como la coliflor, berro, col, soja, patata, tomate,  pimientos, perejil… 
 
Vitamina E Preserva la membrana celular de los daños solares y tiene un gran poder antioxidante y cicatrizante. Se encuentra en el germen de trigo, en el aceite de oliva virgen extra, en los cereales integrales y en los huevos. 
 
Vitamina B5 Destaca por su acción hidratante y antiinflamatoria, salvaguardando a la piel de las quemaduras solares. Está presente en los frutos secos, pasta y pan integral, germen de trigo...
 
Minerales Entre ellos, los más importantes son el hierro, el cobre y el selenio. El selenio, combinado con la Vitamina E, desempeña una función antioxidante. Se encuentra en el germen de trigo, cereales integrales y levadura de cerveza. El cobre ayuda a que el aminoácido tiroxina pigmente de forma adecuada la piel. Se localiza en las legumbres, cereales integrales, ciruelas pasas y guisantes. El hierro se encarga de aportar a la piel un bonito color bronce y puede obtenerse de las legumbres, frutos secos y la carne roja, así como del marisco.
 
Grasas Las llamadas grasas buenas deben formar parte del menú veraniego. Los ácidos grasos poliinsaturados hacen posible que las paredes celulares retengan el agua necesaria, favoreciendo un moreno uniforme. Entre sus principales fuentes están el aceite de oliva, pescado azul y los frutos secos, que ayudan a combatir los problemas de deshidratación y prolongan el bronceado. 
 
Agua Sin duda, en estas fechas no hay que olvidar hidratarse al máximo. El agua no solo es esencial para asegurar las reservar hídricas de la piel, sino que evita la aparición de manchas producidas por el sol y previene el envejecimiento. Además, ayuda a eliminar toxinas y aumenta la diuresis. Se recomienda beber, al menos, un litro y medio al día, aunque lo ideal seria tomar de dos a dos libros y medio, y añadir alimentos que sean ricos en ella, como ensaladas y frutas. Otra forma de añadirla al menú es tomarla en forma de licuados de frutas y verduras o en batidos naturales. 
 
Puedes leer el artículo completo aquí.