Lo más importante en el maquillaje de una novia es que la piel esté perfecta, sana y cuidada. Con la técnica del aerógrafo, es posible lograr un maquillaje ligero, sutil y duradero. De lo que se trata es de resaltar la belleza natural de la novia utilizando tonos ligeros de color marfil combinados con rosas pasteles tipo nude.

La novia ideal

• Aplicar un hidratante, pulverizándolo directamente con el aerógrafo. De esta manera el maquillaje permanecerá por más tiempo y la piel se mostrará más radiante.
• Eliminar las imperfecciones cutáneas con el corrector más adecuado según el tono de la piel, extendiendo el producto bien para conseguir un resultado homogéneo.
• Aplicar la base de maquillaje con el aerógrafo, manteniendo siempre la distancia correcta.
• Intensificar cuidadosamente el extremo del ojo con un tono rosa palo. Este mismo rosa puede aplicarse en pómulos para conseguir un efecto delicado.
• Y para subrayar los labios, potenciar ligeramente el tono utilizando la misma cromática de colores.
• Como punto final, añadir un ligero brillo natural en el pómulo con un hidratante líquido que pulverizamos suavemente.

FOTOGRAFÍA. Honey Gueco

MODELO. Udine Silmane