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ESPECIAL BELLEZA
FOTODEPILACIÓN: GUERRA AL VELLO
El empleo de sistemas emisores de luz pulsada y láser, para eliminar el vello hace tiempo que combinan eficacia, rapidez y seguridad. El último desafío pendiente, que no era otro que ofrecer respuesta a los “casos difíciles” como el tratamiento del vello residual y de las pieles oscuras, se ha superado también a través de la especialización de los mejores equipos.
 

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El término fotodepilación significa depilación mediante tecnologías emisoras de luz, por lo tanto engloba tanto a los equipos láser como IPL (luz pulsada intensa). Estos sistemas se emplean indistintamente en tratamientos encaminados a eliminar el vello, ya que comparten características esenciales: ambos son radiaciones electromagnéticas cuya acción terapéutica se basa en un efecto térmico que se concentra en una estructura biológica determinada, y que en los tratamientos de depilación es la melanina presente en el folículos piloso. En esencia son iguales, pero existen diferencias relativas al modo cómo se transmite la luz. 
En el caso del láser la radiación electromagnética se emite en forma de un haz de luz pura, coherente y monocromática. Todos los fotones se desplazan en la misma longitud de onda y en línea recta, por lo que infieren de manera muy precisa en la melanina. Esta precisión y exactitud ha sido, hasta hace muy poco, el principal inconveniente, porque cada equipo láser veía limitada su operatividad a un único tratamiento. Recientemente están viendo la luz dispositivos que emiten esta fotoenergía en diferentes longitudes de onda, lo que supone un aumento de su abanico terapéutico. A la proverbial eficacia del láser se suma así una versatilidad impensable hasta hace poco.
Por su parte, la luz pulsada intensa se transmite de forma no coherente, lo que significa que las ondas adquieren diferentes tamaños y colores. Su condición de luz policromada, unido a la posibilidad de programar la emisión en un rango variado de longitudes de onda (entre 590-1.200 nm.), la convierten en una fototerapia muy versátil. La aparatología IPL incorpora diferentes filtros, que permiten seleccionar una longitud de onda u otra, en función del tratamiento que se quiera realizar. En los programas de eliminación del vello también se puede modificar la longitud de onda, y con ello la duración del pulso y el intervalo de tiempo de emisión entre uno y otro, para adaptarnos a las características del pelo y la piel: en líneas generales  diremos que en caso de piel blanca y vello fino se aplican filtros cortos (590-615 nm.), y si tanto el tejido cutáneo como el pelo son más oscuros nos decantaremos por filtros más largos (645, 695, 755 nm). 
 

Glosario Foto-técnico

Para aplicar los equipos láser e IPL con las máxima seguridad y sacar todo el rendimiento a sus prestaciones es necesario conocer los parámetros tecnológicos que determinan su acción.
 

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Longitud de onda Banda del espectro electromagnético en la que emite cada equipo. Se mide en nanómetros (nm.). Los equipos láser e IPL empleados en fotodepilación emiten en una longitud de onda entre 700 y 1.400 nm. rango óptimo de absorción por parte de la melanina. 
Relajación térmica Lapso de tiempo necesario para que disminuya en un 50% la temperatura generada por la emisión de luz sobre la estructura diana. En fotodepilación, la duración ideal del pulso se sitúa entre el tiempo de relajación de la epidermis (3-10 milisegundos) y el del folículo piloso (40-100 milisegundos).
Fluencia Relación entre la energía aportada y la superficie de irradiación. Se mide en Julios/cm2. 
Duración del pulso Tiempo que dura la emisión de energía. Se mide en nano, micro o milisegundos.
Delay  Tiempo que transcurre  entre entre la emisión de un pulso y el siguiente. 
Spot Tamaño del haz de irradiación. Cuanto mayor es la superficie que abarca la luz, mayor es su penetración y eficacia. Cuando el spot es reducido, se produce una mayor dispersión de los fotones en dirección radial. En este caso, la energía no llega a los bulbos pilosos y decae la fluencia. Par evitar este efecto de disipación radial, el tamaño del spot debe ser mayor que la profundidad de penetración de la luz en el tejido.
Frecuencia de pulsos Rapidez en la emisión del disparo, es decir, número de pulsos por segundo. Se mide en hertzios, y es el parámetro que determina la duración de la sesión.
 

FOTOTERMÓLISIS: EFICACIA SIN RIESGOS

La acción de la fotodepilación con equipos láser y de luz pulsada se basa en el principio de la fototermólisis selectiva, que permite eliminar el folículo piloso sin afectar a las estructuras adyacentes

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Esto se consigue mediante la emisión de pulsos de luz de alta energía, con longitudes de onda que son absorbidas selectivamente por el cromóforo diana, utilizando tiempos de emisión inferiores al tiempo de relajación térmica del folículo piloso (20-60 milisegundos). La energía lumínica al ser absorbida por la melanina se transforma en energía térmica, es decir, en calor que es el que daña el folículo piloso. Para lograr la eliminación del vello, es necesario destruir las células madre pluripotenciales alojadas en la protuberancia y que son las responsables de inducir la entrada del folículo en fase anágena. Pero hay que tener en cuenta, que en la papila dérmica (estructura vascular que alimenta cada pelo) existen citoquinas estimuladoras e inhibidoras del crecimiento del vello. Si se logra destruir esta estructura lesionaremos las células madre de las protuberancias y obtendremos una depilación permanente. Si por el contrario, actuamos únicamente sobre el bulbo y la papila retrasaremos el crecimiento folicular, pero no alcanzaremos la eliminación definitiva del pelo.

FOTO DEPILACIÓN OPINIÓN EXPERTA

Dos súper-especialistas en el uso de la tecnología láser e IPL en programas de eliminación del vello, nos dan las claves para obtener los mejores resultados y nos descubren los avances más recientes en esta fototerapia.

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La Dra. Josefina Royo de la Torre, subdirectora de Instituto Médico Láser (IML) y una de las mayores expertas en fotodepilación, nos desvela los aspectos prácticos que más interrogantes suscitan respecto a este tratamiento. 
¿Qué FotoTecnología emplear? Como sabemos, un elemento determinante en la elección de uno u otro tipo de láser es el fototipo cutáneo, no es lo mismo abordar la eliminación del vello en una piel clara que oscura o bronceada. Pero más allá de esta consideración, también hay que tener en cuenta las características del pelo, ya que su morfología es distinta según la zona, edad y sexo del paciente. Así, a la hora de decidir qué equipo utilizar hay que tener en cuenta diferentes variables; por suerte, actualmente contamos con avanzados tecnologías que ofrecen índices elevados de seguridad y eficacia sea cual sea el desafío. Y ya que hablamos de desafío, empecemos hablando de la fotodepilación en el rostro, una zona donde el vello se comporta de un modo digamos “particular” porque es hormono-dependiente, es decir está influenciado por la actividad de los andrógenos, hormonas masculinas, presentes no sólo en el hombre sino también en la mujer. En el rostro, igual que en otras zonas con dependencia androgénica: línea alba, canalillo, escote, y región lumbar, existe pelo en estado latente, que puede aparecer cuando menos se espera, incluso tiempo después de haber fotodepilado la zona. La razón es que el estímulo que impulsa a las células madre presentes en el folículo piloso a dividirse y diferenciarse está indirectamente controlado por los andrógenos, lo que significa que a lo largo de los años va apareciendo pelo nuevo procedente de folículos pilosos que se activan con el tiempo y que en el momento de la depilación estaban en estado primordial. En estas áreas no podemos hablar de depilación permanente, sino de depilación sostenida. El vello hormono-dependiente precisa repasos puntuales, aunque espaciados en el tiempo. En el rostro, apostaremos por depilar la región peribucal y el mentón con láser alejandrita de pulso corto y no tocar el resto de la cara, o bien hacerlo con luz pulsada médica, si el vello es grueso. 
En zonas en las que el pelo es de calibre medio, como suele ser el caso de las piernas, ofrecen excelentes resultados los láseres de diodo y los alejandrita de pulso variable, dispositivos muy rápidos, eficaces con  sistema de emisión que permiten alargar la duración de los pulsos y, con ello, eliminar el vello independientemente de su grosor. Además son seguros en pieles de hasta fototipo IV.
El vello de las ingles, zona púbica y axilas, que suele ser profundo y grueso, responde muy bien a la acción del láser de diodo que actúa con mucha seguridad en fototipos IV a VI, pero no es del todo eficaz en pelo fino. Si en estas zonas el vello es fino, pero pigmentado y la piel está entre los fototipos I y III mejor optaremos por los alejandrita de pulso largo y corto.
 
Número de sesiones Con los equipos especializados en fotodepilación que hay hoy en el mercado el 90% de pacientes logran la eliminación del 90% del vello con una media de 8 sesiones. A medida que avanza el tratamiento, el vello va desapareciendo por lo que los periodos en los que la piel se mantienen libre de vello cada vez son más largos. A la hora de programar el tratamiento trataremos de que 2 o 3 sesiones coincidan con los meses de invierno, y hacer otra justo antes del verano, así la piel estará perfecta todo el verano, y en la siguiente cita el bronceado habrá desaparecido por completo.  La depilación láser siempre es más eficaz, rápida y segura si la piel no está bronceada, porque se puede trabajar con más potencia y por lo tanto la cantidad de folículos pilosos eliminados por sesión es mayor. Recordemos que la efectividad de esta tecnología radica en su capacidad para ser absorbida por la melanina de las estructuras pilosas. Este cromóforo diana aumenta en la piel con la exposición solar, lo que obliga al especialista a ser más cuidadoso y limitar la penetrabilidad del láser y su eficacia para evitar un calentamiento no deseado de la piel. Así, el plazo de espera para volver al láser después de la exposición solar depende del fototipo cutáneo y grado de bronceado. 
 
Resultados Una vez eliminado todo el vello, y siempre que no se trate de zonas hormono-dependientes, los resultados son permanentes. Si queda algo de pelo residual brotará al cabo de mucho tiempo y con un par de repasos muy espaciados la depilación será completa. Los tratamientos de fotodepilación se pueden hacer en cualquier parte del cuerpo salvo en el borde inferior de las cejas, zona que evitamos por seguridad para los ojos.
 
Lo Más NUEVO El avance más reciente en fotodepilación médica es un equipo que integra tres sistemas láser para la eliminación del vello: diodo, alejandrita y neodimio:yag, Se trata de una tecnología muy versátil, porque puede aplicarse en distintos fototipos cutáneos, durante todo el año y permite realizar sesiones más cortas y confortables par el paciente.
Otra ventaja destacada es que permite aplicar la energía a través de tres sistemas diferentes de emisión:
Estático  Método clásico de entrega mediante energías altas, pulso a pulso.
In motion Depilación dinámica que consiste en aplicar impactos de luz con altas tasas de repetición y baja tasa de fluencia. Hasta ahora, el método de depilación dinámica se ha realizado con láser de diodo (810 nm.), con buenos resultados ya que los disparos recurrentes permiten alcanzar la temperatura de lesión térmica del folículo con un alto grado de seguridad para la piel, peor, en caso de pelo miniaturizado en pacientes de piel oscura tenía, el empleo de longitudes de onda y pulsos cortos, necesarios para ganar eficacia, comprometía la integridad de las pieles con fototipos altos. Este nuevo dispositivo láser permite el modo de depilación in motion mediante la longitud de onda correspondiente al láser alejandrita (755 nm.) y a 10 pulsos por segundo, lo cual permite abordar tratamientos de difícil parametrización, como el pelo fino o miniaturizado (con menor concentración de melanina) con longitudes de onda más bajas y coeficientes de absorción por la melanina superiores al del láser de diodo ganando con ello en efectividad. Ello se suma a su eficacia para tratar fototipos altos y pelo fino. 
Por lo que se refiere a la emisión en modo neodimio:yag correspondiente longitud de onda de 1064 nm. permite la depilación dinámica en fototipos altos (V y VI).
Ráfaga También conocido como modo stacking permite fabricar trenes de pulsos de 1-2-3-4-5 micropulsos, iguales a los de la modalidad de fotodepilación dinámica, con pequeños intervalos de tiempo para trabajar con mayor precisión en áreas pequeñas o delicadas. Esta modalidad está disponible tanto para alejandrita como diodo.
 
El DIODO y otros sistemas imbatibles
Carmen Díaz directora del centro Germaine Goya, conoce a la perfección los diferentes sistemas que, a día de hoy ofrecen los mejores resultados en eliminación del vello, así que le hemos pedido que comparta sus conocimientos y nos dé las claves para obtener el máximo rendimiento de esta terapia. Lo primero que señala es que en los últimos años, los avances en tecnología láser e IPL han afianzado la seguridad en fotodepilación y han acortado los tiempos de tratamiento. Sin ir más lejos, nos habla de la nueva generación de láser diodo, que basa su acción en el innovador concepto de fototermólisis progresiva, es decir, promover un calentamiento gradual de la dermis que se mantiene durante un tiempo determinado. El folículo y su entorno reciben la energía de manera suave y continuada, logrando alcanzar una temperatura moderada (45- 50 ºC) suficiente para generar una lesión irreversible del folículo y por tanto inhabilitarlo para el crecimiento del pelo. En esta tecnología, el manípulo emisor está en constante movimiento sobre la piel, realizando 10 disparos por segundo a baja energía. Ello aporta la ausencia de dolor y un bajo riesgo de quemadura, ya que la epidermis prácticamente no se calienta.  Al no resultar molesta la aplicación se evita tener que utilizar cremas anestésicas, que si se aplican en cantidades excesivas pueden llegar a penetrar intradérmicamente, alcanzar el torrente sanguíneo y causar problemas. Además, la baja energía empleada resuelve con éxito la depilación en pieles negras o bronceadas y extiende el uso del láser a cualquier época del año. 
Los importantes adelantos y mejoras incorporados a la aparatología suponen que a día de hoy la fotodepilación prácticamente no tenga límites. Existe una tecnología adecuada a cada tipo de piel y de pelo, lo cual no significa que los sistemas que llevan años utilizándose hayan quedado obsoletos, todo lo contrario, la eficacia y seguridad de algunas de estas tecnologías es tan incuestionable que Carmen propone recurrir a ellas para salir victorioso en algunos “casos difíciles”.
Piel clara y vello poco pigmentado El láser alejandrita, de los mas veteranos en fotodepilación, es perfecto para estos casos dado que su longitud de onda media, situada en los 755 nm., es extremadamente afín a la melanina. El IPL multipulso también es otra excelente opción frente a estos casos. Esta tecnología multipulso también es eficaz cuando el vello es algo más oscuro, y la piel igualmente clara.
Pieles ligeramente bronceadas y vello oscuro y profundo La irrupción del diodo supuso un punto de inflexión importante porque por fin las pieles bronceadas y oscuras entraban en el target y eran aptas para la depilación láser. El único inconveniente es que pueden resultar algo molestos. La solución llegó de la mano de los láseres de Neodimio Yag, que hoy se siguen aplicando cuando el vello es muy duro y profundo.
 
DEPILACIÓN ¿DEFINITIVA O PERMANENTE? Es cierto que ambos términos pueden emplearse como sinónimos, pero se suele hablar de depilación permanente y no definitiva. Tengamos en cuenta que siempre hay folículos en fase de caída o latentes donde aún no ha germinado el pelo. Por eso el tratamiento exige varias sesiones, aunque a medida que éste avanza, la cantidad y el grosor del pelo irá disminuyendo, y los resultados se irán apreciando cada vez como mejores.